Publicado en junio 9, 2022 | 3 mins de lectura
Para iluminar tus fotografías gastronómicas, podemos empezar con un solo flash. Al realizar tus fotos de comida lo mejor es colocar la luz un poco diagonal de donde tengas tu plato, esta ubicación puede ser a nivel del plato o elevada e inclinada unos 45°.
En la imagen que verán más abajo podrán apreciar claramente un ejemplo de cómo luce una foto con este tipo de iluminación. El resultado final de tu imagen va a depender también de lo que quieras transmitir, los colores de fondos que uses, los alimentos, props, la dirección de arte; todo esto será determinante en el resultado final.
Es importante tener presente que esta metodología de uso de una sola luz, también puede generar un look “dark” a tu foto.
En esta imagen deseábamos que el look fuese oscuro por lo que solo se empleó una luz diagonal a unos 45°. Otra opción, podría haber sido colocar una cartulina blanca para rebotar y darle un poco de luz al lateral derecho del producto (el pan, en este caso).
En el siguiente ejemplo se utilizó un esquema un poco similar, pero se colocaron dos flash en lugar de uno y se usaron cartulinas negras para que absorbieran un poco la luz y generara de nuevo este estilo un poco más oscuro. Estas cartulinas se colocaron para que no permitieran la entrada de mucha luz del flash ubicado a la izquierda de la imagen (Flash 1). Acá agregamos unos elementos extra los cuales son un plato y cubiertos negros, para crear un contraste más marcado entre la comida, el fondo y los props, así resaltábamos bien el color de las fresas y los waffles.
El segundo flash (Flash 2), se colocó a un lateral con poca potencia para así darle un leve toque de luz al lado derecho del ,,fondo y así resaltar sus texturas.
Para este otro ejemplo de cómo usar la luz artificial, ubicamos dos flash, pero en este caso uno diagonal al otro. El primero viene desde el sector posterior izquierdo del set (para generar sombras largas en el ,,fondo texturizado que se usó de base) y el segundo se ubicó en la parte inferior derecha. Esta luz se usó de manera directa con un reflector y delante de ella un difusor redondo traslúcido para iluminar ligeramente la parte frontal de los panes, y que no resultara una imagen final tan oscura y contrastada con las sombras, generando un ambiente más claro (lo contrario de las dos imágenes anteriormente).
En la iluminación de esta fotografía ¿Cuántas luces crees que se usaron?
Para los que pensaron 3 luces… chin chin!
Este esquema de iluminación de tres luces, está compuesto de la siguiente manera:
Dos luces diagonales con modificadores strip. Una en la parte trasera derecha de la imagen, otra diagonal a esta en la parte delantera izquierda del set para iluminar la botella en ambos costados, la copa y parte del fondo, para que este no quedara tan sub expuesto y se lograra apreciar su textura). Finalmente una tercera luz, casi cenital con un reflector y una colmena de 20”, para que la luz apunte directamente a la carne y así destacar su textura, sin afectar el resto de los elementos que se encuentran alrededor.
Para esta foto, se utilizaron dos de nuestras creaciones: el ,fondo canvas rusty y una base de madera envejecida, para darle el toque rústico deseado.
Ahí lo tienes… Tu iluminación para fotografías gastronómicas en pasos simples, configurada con una, dos y tres luces. Ahora te toca a ti poner en práctica estos consejos, hasta que logres el estilo que deseas para tus fotos 😉